La Sílfide

El joven escocés James está durmiendo junto a la chimenea la mañana de su boda cuando le despierta el beso de una sílfide que desaparece. Le pregunta a Gurn si él también ha visto a la criatura, pero su amigo niega haberla visto y le recuerda a James que pronto se casará.

A pesar de esforzarse al máximo cuando llegan su prometida Effie, su familia y sus amigos, James sigue distraído con pensamientos y visiones de la hermosa sílfide que le visitó antes. Ve una figura junto a la chimenea y cree que es la sílfide, pero al acercarse se decepciona al encontrar en su lugar a la Vieja Madge. Le pide a la bruja que se marche, pero todos los invitados la invitan a quedarse para que les adivine el futuro. Para su consternación, Effie es informada de que en realidad no va a casarse con James, sino con Gurn, ya que su prometido está enamorado de otra persona.

Effie y sus amigas se retiran arriba para preparar la boda a pesar del pronóstico de la Vieja Madge. Mientras tanto, la sílfide visita a James y le profesa su amor. Él hace todo lo posible por resistirse, pero no puede negar los sentimientos que también siente por ella. Gurn es testigo de esta interacción y llama a los demás para contarles lo que ha visto. Su público se ríe de él y comienzan los festejos de la boda.

La sílfide aparece de nuevo intentando desesperadamente distraer a James y llevarlo a su casa del bosque. Consigue agarrar con picardía el anillo que James está a punto de poner en el dedo de Effie y se lo coloca en el suyo. Sale volando con James persiguiéndola. Cuando Effie descubre que su prometido ha desaparecido, se siente angustiada. Gurn, por su parte, se alegra y dirige a los hombres de la fiesta en busca de su amiga.